Por la puerta de atrás. José Antonio Ávila López
Desde que el embaucador y mentiroso Pedro Sánchez olió y tocó poder, surgieron en él un grupo de ideas que desde siempre han sido pésimas. Y esas ideas son las que le aproximan a un bochornoso final, un final por la puerta de atrás, un final que, según dicen, acabará con bronca en la sede de Ferraz con los socialdemócratas de siempre, y ahí se le acabará la poca dignidad que le queda
Conceptos que aprendí...
Desde que el embaucador y mentiroso Pedro Sánchez olió y tocó poder, surgieron en él un grupo de ideas que desde siempre han sido pésimas. Y esas ideas son las que le aproximan a un bochornoso final, un final por la puerta de atrás, un final que, según dicen, acabará con bronca en la sede de Ferraz con los socialdemócratas de siempre, y ahí se le acabará la poca dignidad que le queda. Sé que eso ocurrirá así, porque a estas alturas poco me extraña cualquier cosa, pero créanme, queridos lectores, no siento pena. Esta legislatura actual será la última de Sánchez, y podría dedicarle ya una despedida más dura, más cargada de reproches, señalamiento de faltas... Ya saben, lectores, lo que todos sabemos, lo que todos decimos. Fíjense cuánto le habrán señalado todo esto, que ese machaque ha conseguido que el Presidente del Gobierno no me merezca ningún respeto, y es que se lo merece, aunque pueda parecer duro. Sánchez nunca ha tenido ilusión y ganas para hacer una España mejor, que son cualidades indispensables para ser Presidente del Gobierno. Pedro ha querido contentar a todos los enemigos de España, dejar las cosas correr, y cuando alguna vez (pocas) ha querido arreglar el desaguisado, sus chapuceras soluciones sólo le han hundido más a él y a España. Sánchez, hasta que acabe la legislatura, se va a quedar solo : creo que sus medios de comunicación, amigos o incluso sus compañeros de puño y rosa lo dejarán solo. Sus medidas impopulares no han mejorado un panorama desolador de una legislatura a otra, y se ha visto rodeado de gente incompetente, y ahora lo que le queda es un vapuleo tras otro. Lo dicho, Sánchez nunca ha logrado darme pena, ya que desde el primer instante quiso gobernar con una fórmula que en sí era ingobernable y nada transparente. Cuando salga de Moncloa se dedicará a quedarse en el Consejo de alguna multinacional, y no, no le voy a desear suerte.
José Antonio Ávila López
45462148-A
Asesor político y corrector de textos
Ex concejal Ayuntamiento Rubí
Telf. 661.07.14.76
08191 Rubí (Barcelona)
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